La Antorcha Magacín

[Curaduría de Camilo Pardow]

La realidad visible es la base del proceso fotográfico, y también es el juego de organizar un rectángulo: geometría, con el rectángulo en la mano (la cámara), yo busco. Fotografía: ello (el sujeto) dado por la geometría.

Sergio Larraín

PUENTES

Proyecto fotográfico de Gonzalo Alves Coronado

Posiblemente fue a la vista de la muerte cuando el hombre tuvo por primera vez la idea de lo sobrenatural y decidió esperar más allá de lo que veía. La muerte, que fue el primer misterio, pone al hombre en el camino de los otros misterios, eleva su pensamiento de lo visible a lo invisible, de lo pasajero a lo eterno, de lo humano a lo divino.

Fustel de Coulanges

El proyecto fotográfico Puentes es una exploración visual y existencial de los límites, las transiciones y las resonancias que habitan en los paisajes de la memoria. Explora la tensión entre la vida y la muerte en los puentes de Valdivia, lugares testigos del suicidio de muchas personas. Gonzalo construye puentes mentales, portales que separan y unen, al mismo tiempo, el mundo de los vivos y los muertos. En este espacio liminal, la fotografía no solo registra, sino que también imagina, en un lenguaje silencioso, los cuerpos que emergen en formas de ramas, los reflejos del agua que se duplican conectando el cielo y la tierra con los susurros del paisaje para quien se atreve a escuchar. La niebla actúa como medio y metáfora, su densidad interpela al espectador a diluirse en historias que terminaron, pero que resisten en imágenes.

En Puentes la memoria del paisaje emerge como una eco-poesía que nos conecta con un lenguaje ancestral, críptico y enigmático. El paisaje se abstrae y se transforma en un espacio mental, un umbral simbólico donde los límites entre lo tangible y lo etéreo se desdibujan. Este trabajo le permite al autor conectar con otras memorias: familiares de los muertos, testigos de los acontecimientos y su propia memoria familiar. Este corpus tiene la capacidad de expandir su alcance hacia una memoria colectiva y transgeneracional, donde la fotografía se transforma en una red de recuerdos, sensaciones, experiencias y dolores en torno a la muerte. Las imágenes expresan el deseo de fusionarse con el mar y diluirse en una memoria colectiva y ancestral, una memoria que rechaza el dolor para convertirse en refugio.

Así, este imaginario de disolución también alude a una resistencia: la memoria del mar como un archivo vivo, una superficie que alberga las últimas imágenes de los desaparecidos, de los cuerpos en los ríos. Las ondulaciones y vibraciones del agua manifiestan una paradoja inherente: la fotografía, como medio, captura la superficie visible, inscribe y hace presente lo ausente, un efecto de presencia/ausencia; sin embargo, es insondable, contiene al interior profundo, memorias no escritas, enigmas e historias inacabadas. Al interior de la niebla y contemplar la muerte, no como un fin, sino como una transformación inscrita en la memoria del agua y la espesura del paisaje valdiviano.

CP

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Gonzalo Alves Coronado. Fotógrafo valdiviano. Motivado por retratar los paisajes de su entorno, la identidad de su ciudad y expresar sus propias emociones, se inicia en la fotografía, oficio que lo llevaría pronto a participar en exposiciones colectivas como Figuración de Autointerpretación (Galería Barrios Bajos, Valdivia, 2018) y RESISTE (Galería Réplica, Valdivia, 2022). En 2024, se tituló del Instituto Profesional Arcos y fue reconocido como el estudiante destacado de su generación. Mientras cursaba sus estudios formales, formó parte de un grupo que retrató la fallida Convención Constituyente, donando el material al Archivo Nacional y exhibiendo el trabajo en Detrás del Mañana (Fotogalería Arcos, Santiago, 2022). Su proyecto de titulación, PUENTES, fue presentado en Emergentes (Fotogalería Arcos, Santiago, 2024) y en Tercer Espacio (Taller 556, Osorno, 2024). Su primera muestra internacional fue Long Distance (One Toi Tū, Nueva Zelanda, 2024), con imágenes de su serie La Erosión de los Cuerpos. Ese mismo año, participó con una brigada en el Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso, fue seleccionado en la residencia FOCCO y publicó fotografías en revistas literarias como Oropel y Phantasma. Además, cofundó la editorial Nuestro Jardín, autopublicándose y editando numerosas publicaciones de otros fotógrafos emergentes, distribuyéndolas en librerías, en las calles y en ferias como Stgo Foto, Mekánica, entre otras. Actualmente reside en su ciudad natal, donde continúa desarrollando proyectos fotográficos y editoriales.